Los nuevos vehículos, diseñados para responder a incendios forestales, inundaciones y otras emergencias, han sido entregados a Protección Civil de cada municipio de la isla.
El Cabildo de Gran Canaria ha incorporado 21 vehículos todoterreno ligero, uno para la Agrupación de Protección Civil de cada municipio de la isla, con el objetivo de mejorar la capacidad de respuesta ante emergencias. Esta adquisición forma parte de un proyecto para dotar a los servicios de emergencia con equipos de alta capacidad operativa, permitiendo una intervención rápida y eficaz en incendios forestales, inundaciones, nevadas y otras situaciones críticas.
Los nuevos vehículos están carrozados sobre chasis Ford Ranger de 170 CV, ofreciendo una combinación de potencia y versatilidad idóneo para terrenos exigentes. Su carrocería externa está equipada con una baca en el techo que permite el almacenamiento de dotación adicional, mientras que en su interior se ha instalado un depósito de agua con capacidad de 300 litros. Además, cuentan con un grupo motobomba de alto rendimiento que proporciona un caudal de 50 L/min a 50 bar de presión, conectada a una devanadera con 50 metros de manguera y un mangote de succión para la captación de agua en campo.
El equipamiento de extinción se complementa con una motobomba flotante para facilitar el repostaje en zonas de difícil acceso, y una completa dotación de herramientas de emergencia que incluye extintores, motosierras, hachas, cizallas y batefuegos, entre otros elementos esenciales para la intervención en incendios y rescates.
La entrega de estos vehículos supone un avance significativo en la capacidad operativa de los servicios de emergencia de Gran Canaria, ya que permitirán una respuesta más rápida y eficiente en cualquier tipo de siniestro. Al estar distribuidos en cada municipio, los equipos de Protección Civil podrán actuar de inmediato en caso de incendio o desastre natural, reduciendo los tiempos de respuesta y mejorando la seguridad de la población.