Los vehículos entregados en Palma vienen a reforzar el compromiso de limpieza con agua que se realiza todos los años en verano. Dichos vehículos funcionan con GAS generado por la propia empresa, con lo que consiguen una optimización total de recursos además de minimizar al máximo la huella de carbono generada por el uso de esta maquinaria.
Por parte de Feniks se han integrado elementos adaptados a las necesidades de la zona, teniendo en cuenta la dureza del agua de la isla y las condiciones de salinidad ambientales que generan un desgaste prematuro de la maquinaria. Para ello se ha aplicado un acabado de pintura especial a todas las estructuras metálicas de la carrocería que garantiza la durabilidad del equipo, la cisterna de 9.050 litros de capacidad ha sido fabricada en poliéster reforzado con fibra de vidrio por lo que desaparece la corrosión. Todos los equipos han sido introducidos en un armario insonorizado tanto para protegerlos como para minimizar el ruido generado.
La barra delantera de baldeo se controla mediante unos joysticks instalados en el volante y ha sido integrada bajo el frontal del vehículo consiguiendo un menor radio de giro y dotando al vehículo de mayor polivalencia para acceder a zonas complicadas.